CASPE (ZARAGOZA), 17 Nov. - En un reciente operativo policial, la Guardia Civil ha descubierto una gran plantación de marihuana en una granja abandonada en el municipio de Caspe. Las autoridades encontraron un total de 1.762 plantas en diferentes etapas de crecimiento y 60 kilos de marihuana picada almacenada en un congelador. Se sospecha que el objetivo de esta plantación era producir hachís de alta calidad utilizando la técnica 'ICE-O-LATO'.
El responsable del mantenimiento de la plantación, un hombre albanés de 26 años en situación irregular en España, ha sido detenido y acusado de un delito contra la salud pública por cultivo y elaboración de drogas. Actualmente se encuentra en el Centro Penitenciario de Zuera (Zaragoza), según ha informado la Guardia Civil.
La investigación se inició a raíz de la posibilidad de que se estuvieran cultivando plantas de cannabis en las proximidades de una granja abandonada en Caspe. Los agentes descubrieron que la granja llevaba años sin actividad y que estaba registrada a nombre de una persona extranjera.
El pasado 14 de noviembre, durante una inspección en los alrededores, los agentes observaron una red de sombreado cerca de las naves de la granja, donde se habían cultivado las plantas de marihuana. Al comprobar que todas las puertas de las naves estaban abiertas y no encontrarse a nadie en el lugar, se comenzó una inspección del interior de las instalaciones para descartar posibles delitos.
En el interior de las naves, se descubrieron varios habitáculos construidos con aislantes térmicos, destinados al cultivo de marihuana. En dos de estos habitáculos se encontró una gran cantidad de plantas de cannabis en diferentes etapas de crecimiento, así como todos los elementos necesarios para su cultivo. En ese momento, los agentes detuvieron en el lugar a un hombre que estaba realizando tareas de mantenimiento.
La Guardia Civil también encontró un congelador que contenía 60 kilos de marihuana picada y numerosos sacos de hielo. Se cree que la congelación de la marihuana tenía como objetivo la producción de hachís de alta calidad utilizando la técnica del 'ICE-O-LATOR', la cual implica la extracción de los tricomas de la planta de marihuana mediante el uso de bloques de hielo, agua a baja temperatura y tamices de diferentes grosores.
Además, durante la inspección de la granja abandonada, los agentes descubrieron que no había conexiones eléctricas fraudulentas en el exterior, pero encontraron una trampilla entre las dos naves de la granja de la cual salía humo, olor a combustión y calor. Al abrir la trampilla, se descubrió una escalera que conducía a una cavidad subterránea donde se encontraba un generador industrial de gasóleo valorado en aproximadamente 20.000 euros.
La Guardia Civil continúa con la investigación para determinar el destino de las sustancias estupefacientes y localizar a más personas involucradas en este caso.