En una inusitada y tensa sesión en las Cortes de Aragón, el portavoz de Vox, Alejandro Nolasco, ha disparado críticas hacia los partidos de izquierda, acusándolos de un victimismo que, a su juicio, les ha permitido operar sin contrapesos. Durante una conferencia de prensa posterior a la sesión plenaria, Nolasco hizo alusión a la figura del diputado de Podemos, Andoni Corrales, a quien descalificó, sugiriendo que carece de las competencias necesarias para ejercer su función en el parlamento.

La polémica desencadenó la salida del hemiciclo por parte de los representantes del PSOE, CHA, IU y Podemos, quienes no pudieron tolerar las declaraciones de Nolasco, que cuestionaban el nivel de Corrales. Esta situación se enmarcó en un contexto más amplio de confrontaciones en un debate donde las acusaciones volaban, y donde los ecos de episodios históricos fueron evocados por el portavoz de Vox.

A la causa de este conflicto se sumó la mención por parte de Corrales de un fallo del Tribunal de Cuentas que afectaba a Vox, lo que llevó a la presidenta del Parlamento, Marta Fernández, a exigir la eliminación de las declaraciones de Nolasco del acta oficial, demanda que fue ignorada por el portavoz de la formación de derecha.

Tras la finalización del pleno, Nolasco manifestó un sentimiento de que su partido ha cambiado el juego en un ambiente que favorecía a la izquierda. "Antes, ellos disfrutaban de una cómoda impunidad", expresó, comparando su postura con la de figuras históricas que intentaron silenciar a la oposición durante momentos críticos de la democracia.

El portavoz también arremetió contra lo que él considera una incapacidad de la izquierda para argumentar de forma constructiva, manifestando que recurren a la queja y al victimismo cuando se sienten acorralados. Su crítica se extendió a la formación de Podemos, a la que acusó de tener vínculos con situaciones que, según su juicio, perjudican la estabilidad del país.

Las acusaciones de Nolasco se volvieron más específicas cuando enumeró insultos que, según él, le ha proferido Corrales. "Nos ha calificado de gentuza y cavernícolas", continuó, reafirmando su intento de desestabilizar la posición de su adversario a la luz de lo que considera ataques infundados.

En lo relativo a la reciente investidura del presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, Nolasco denunció que Corrales había tachado de "nazis" a los que apoyaron dicho proceso, representando lo que él interpreta como una falta de respeto generalizada hacia aquellos que no comparten la ideología de la formación morada.

Por si fuera poco, Nolasco no se detuvo ahí. Insistió en cuestionar la capacidad moral de Corrales para formar parte del Parlamento, reiterando que su conducta y sus afirmaciones son producto del odio y del resentimiento, lo que, según él, lo inhabilita para participar en cualquier debate político serio.

En otro episodio que mantuvo viva la polémica, el portavoz de Vox recordó que, en un evento anterior, el eurodiputado de Podemos, Miguel Urbán, utilizó un lenguaje despectivo hacia él, pero lamentó que no se haya recibido una condena unánime de las distintas fracciones del parlamento frente a tales comentarios.