El 2 de julio en Zaragoza, se llevó a cabo una sesión plenaria extraordinaria en las Cortes de Aragón, donde se aprobó de forma unánime un decreto ley por parte del Gobierno autonómico. Esta normativa tiene como objetivo principal proporcionar apoyo a las comunidades afectadas por las tormentas que azotaron la región los días 13 y 14 de junio, impactando a un total de 12 municipios en las provincias de Zaragoza y Teruel.

El encargado de presentar esta iniciativa fue el consejero de Hacienda, Roberto Bermúdez de Castro. Durante su intervención, destacó que este decreto actúa como un "paraguas" que engloba distintas medidas y órdenes previamente implementadas por las diferentes áreas del Gobierno. Estas acciones incluyen la rehabilitación de carreteras y la restauración del acceso al agua potable, ambas cruciales para la recuperación de las zonas más afectadas.

El decreto se articula en torno a varios ejes de intervención. Uno de ellos está dirigido a los ciudadanos, con un especial énfasis en compensar a quienes contribuyeron con sus recursos y esfuerzos a la recuperación de sus comunidades. De esta forma, el Gobierno aragonés reembolsará los gastos incurridos y ofrecerá ayuda a aquellos que hayan perdido bienes, tanto muebles como inmuebles.

Desde el punto de vista económico, se establecen ayudas específicas para los negocios perjudicados, como es el caso de una empresa química en La Zaida y hoteles en Almonacid de la Cuba. El Gobierno está comprometido a cubrir, con hasta 150.000 euros por localidad, los costos de obras de emergencia que los ayuntamientos consideran necesarias, con una mayor concentración de acciones en localidades como Azuara, Almonacid y Villar de los Navarros.

En términos de infraestructura comunitaria, se destinarán recursos para la reparación de puentes en Belchite y Azuara, así como para la reconstrucción de la carretera A-1506, subrayando la importancia de la recuperación de infraestructuras agrícolas y del suministro de agua para los afectados.

José Antonio Lagüens, portavoz del PP, subrayó la importancia de este decreto al señalar que llega en el momento adecuado para implementar medidas urgentes. Hizo hincapié en que involucra múltiples departamentos del Gobierno, recordando la tardanza en la aprobación de medidas tras calamidades pasadas, como las tormentas ‘Gloria’ y ‘Filomena’.

Por su parte, el diputado del PSOE, Daniel Alastuey, destacó que este decreto representará un paso crucial para restaurar las infraestructuras y ayudar a los damnificados. Además, alertó sobre la relación entre fenómenos climáticos extremos y el cambio climático, enfatizando la necesidad de continuar con políticas comprometidas con la Agenda 2030.

Desde Vox, Santiago Morón expresó que las pérdidas causadas por las tormentas son irreparables y abogó por medidas preventivas, como la limpieza de ríos y barrancos. Criticó la falta de financiamiento en su comunidad para acciones de prevención, contrastando con presupuestos aprobados en otras regiones.

El portavoz de CHA, José Luis Soro, reafirmó su apoyo a esta clase de decretos, resaltando la urgencia de la situación y la necesidad de tomar medidas concretas. Por su lado, Pilar Buj de Aragón-Teruel Existe, pidió una tramitación ágil de las ayudas y pidió colaboración entre administraciones evitando contendidos políticos que obstaculicen el progreso.

Andoni Corrales, de Podemos, expresó su preocupación por el negacionismo del cambio climático y alertó sobre la posibilidad de que eventos catastróficos se repitan en el futuro. Desde IU, Álvaro Sanz destacó la función preventiva de AEMET y la importancia de las ayudas anunciadas, recordando la utilidad de los impuestos para tal fin.

Finalmente, el diputado del PAR, Alberto Izquierdo, insistió en que el Gobierno debe estar al lado de los ciudadanos en momentos difíciles, subrayando que los ayuntamientos no deberían ver a la administración como un obstáculo, sino como un aliado en la resolución de crisis que requieren atención inmediata.