
En Zaragoza, la Guardia Civil ha descubierto casi 1.200 kilos de hachís ocultos dentro del sistema de refrigeración de un camión que transportaba frutas y verduras en una ruta internacional. El hallazgo tuvo lugar durante un punto de inspección en un polígono de La Muela.
El camión levantó sospechas al realizar una maniobra evasiva al notar la presencia policial, lo que llevó a su inmediata detención. El conductor, con antecedentes por delitos contra la salud pública, fue identificado y se procedió al registro de la carga.
El vehículo, destinado a transportar productos perecederos a Italia, fue inspeccionado con un perro detector de drogas que alertó sobre la presencia de estupefacientes en el final del semirremolque y la cabina tractora.
Debido a la cantidad de productos en el camión, fue necesario trasladarlo a una nave cercana para la extracción de la carga con ayuda de un toro mecánico y la revisión en busca de compartimientos secretos que pudieran esconder la droga.
Tras retirar la mercancía, el perro marcó nuevamente en el mismo lugar, donde se encontraba un espacio manipulado que debía albergar el sistema de refrigeración, pero en su lugar se hallaron bolsas herméticas con tabletas de hachís impregnadas en líquido para disimular el olor.
Tras el pesaje, se determinó que el hachís intervenido ascendía a 1.156,5 kilos, distribuidos en 224 tabletas. El conductor fue detenido por tráfico de drogas y por tener prohibida la salida del país.
Ante la cantidad de alimentos perecederos en el camión, la Guardia Civil entregó la mercancía al Banco de Alimentos, que recibió 13 toneladas de frutas y hortalizas. La operación contó con la participación de varios cuerpos policiales, incluyendo el Grupo Cinológico con un perro detector de drogas.
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