El Ayuntamiento de Zaragoza ha puesto en marcha su servicio de emergencia para combatir el frío y proteger a las personas que se encuentran en situación de calle. Con esta medida, se han habilitado 32 plazas adicionales en los pabellones destinados a emergencias climáticas, sumándose a las más de 100 plazas que ya existen en el albergue municipal y a la red de viviendas disponibles para quienes carecen de hogar.

Actualmente, la administración local gestiona un total de 78 apartamentos, que incluyen 281 habitaciones. A pesar de los desafíos que representan las obras de reforma integral del albergue, el Ayuntamiento ha decidido mantener el dispositivo de años anteriores, garantizando así el apoyo necesario para la población más vulnerable durante los meses más fríos del año.

Marian Orós, consejera municipal de Políticas Sociales, ha afirmado que este será el último invierno en el que se empleen módulos prefabricados, ya que una vez finalizadas las obras del albergue, se contará con un edificio que ofrecerá un ambiente dignificado y todas las comodidades necesarias para sus usuarios.

Orós ha destacado la disponibilidad de más de 400 plazas entre las diferentes opciones de alojamiento, incluyendo los módulos de frío, las habitaciones, la Casa Abierta y los pisos. Este año, se han adicionado cinco plazas específicas para mujeres, en respuesta a un ligero aumento en el número de mujeres en situación de calle detectado por los servicios sociales.

Con estas acciones, el Ayuntamiento de Zaragoza reafirma su compromiso de garantizar que ninguna persona deba pasar la noche en la calle durante los días de intenso frío, ampliando así su cartera de recursos y ayuda.

Además, la consejera ha enfatizado la importancia de la colaboración con Cruz Roja y Protección Civil para alentar a las personas que duermen en la calle a que utilicen el albergue, especialmente en invierno. A todas las personas sin recursos, ya sea que se alojen o no en el albergue, se les proporciona alimentación, desde desayuno hasta cena, así como café caliente durante todo el día. También se ofrecen servicios de ducha y ropa de abrigo para quienes lo necesiten.

El dispositivo se reforzará aún más cuando entre en funcionamiento el protocolo de frío extremo, que se activará en aquellos días en que las temperaturas mínimas caigan por debajo de cero grados o cuando las condiciones térmicas sean severas debido a la niebla o vientos intensos.

Bajo estas circunstancias, el albergue adaptará sus horarios y protocolos de acceso, permitiendo la acogida de cualquier persona las 24 horas del día. Este centro cuenta con 83 habitaciones individuales, 32 en los pabellones de emergencia (16 en cada uno), y una habitación compartida destinada a cinco mujeres.

Adicionalmente, el albergue ofrece seis plazas en módulos individuales, cuatro para familias, diez en la Casa Abierta para hombres y seis en la de mujeres, esto último como recursos de baja exigencia para quienes presentan dificultades especiales de alojamiento.

Un componente clave del plan son las 78 viviendas distribuidas por la ciudad, que suman 281 habitaciones. En los últimos años, el Área de Políticas Sociales ha incrementado significativamente este número, en colaboración con la sociedad municipal Zaragoza Vivienda y diversas entidades sociales, con el objetivo de favorecer procesos de inserción para las personas sin hogar dentro del Plan de Primera Oportunidad del Ayuntamiento de Zaragoza.

El albergue municipal no solo continuará siendo el epicentro de esta intervención, sino que también se erigirá como un espacio visiblemente accesible para quienes buscan un lugar seguro para hospedarse. El personal del albergue llevará a cabo un proceso de primera acogida, realizando cribados y derivaciones para asegurar que cada usuario reciba el tipo de alojamiento que mejor se adapte a sus características y necesidades particulares.