ZARAGOZA, 15 May. - El candidato a la Alcaldía de Zaragoza por la coalición Ciudadanos-Tú Aragón, Daniel Pérez Calvo, ha destacado la necesidad de adoptar medidas para reducir la contaminación acústica en la ciudad, ya que esta produce "serios problemas de salud". El problema de ruidos es especialmente grave en zonas como el sur de la ciudad, en Arcosur, Valdespartera y Montecanal, así como en zonas saturadas por el ocio nocturno. Por ello, Pérez Calvo ha abogado por trazar planes y objetivos concretos, actualizar las ordenanzas y cumplirlas con tolerancia cero. También ha propuesto la posible revisión de la ordenanza del ruido, ya que en muchos aspectos puede estar obsoleta.

El candidato ha defendido la necesidad de tener en cuenta las recomendaciones internacionales y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que hablan de 60 a 65 decibelios como nivel máximo durante el día y de rebajarlo a 30 decibelios durante la noche. En la ciudad, "podemos estar entre 50 y 55, cuando hay el ruido normal, por decirlo de alguna manera".

Pérez Calvo ha apostado por reunirse con expertos en salud y sostenibilidad para establecer la mejor manera de legislar y hacer que se cumpla la norma. Los políticos estarían para activarla y hacer que se cumpla en lugar de quedarse en el discurso político.

El objetivo final es conseguir una ciudad sostenible, equilibrada, con calles saludables donde la gente pueda convivir respetando el derecho a la salud y el derecho al descanso de los vecinos. En este sentido, Pérez Calvo ha valorado las reivindicaciones de la Plataforma Stop Ruido como justas y ha planteado la posibilidad de utilizar fondos europeos Next Generation para hacer obras en viviendas afectadas por el ruido y mejorar el aislamiento acústico.

El Mapa de Ruidos de Zaragoza tiene que ser actualizado y es necesario tener en cuenta las zonas saturadas por el ocio nocturno, así como las zonas afectadas por el ruido de los aviones en el sur de la ciudad. Pérez Calvo ha insistido en la necesidad de buscar soluciones para aquellos que han comprado una vivienda en estas zonas y sufren las consecuencias del ruido.