El domingo 16 de marzo, Teruel se convirtió en el escenario de una jornada especial, ya que el rey Felipe VI eligió la estación de esquí de Aramón Valdelinares para disfrutar de un día en la nieve. Esta visita marca la primera vez que el monarca se presenta en esta instalación turolense, a pesar de ser un habitual en las montañas del Pirineo aragonés.

Las recientes nevadas han dejado un tapiz inmaculado de nieve en polvo, brillante y perfecto para quienes buscan deslizarse por las suaves pendientes de la estación. Las condiciones son ideales para los aficionados al esquí, que pueden aprovechar al máximo esta inusual calidad de la nieve.

Desde Aramón, se subraya que la presencia del rey resalta el “rol esencial” que juegan Valdelinares y Javalambre como motores económicos en la región, subrayando la importancia del turismo y el esquí para el desarrollo local de la provincia de Teruel.