La portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera, ha exigido al Gobierno del Partido Popular de la ciudad que instale los toldos de la calle Delicias a la mayor brevedad, a pesar de considerarlo una chapuza, ya que han costado 500.000 euros.

Ranera ha explicado, este jueves, en una rueda de prensa, y tras conocer que el Ayuntamiento de Zaragoza no se responsabilizará de la instalación de los toldos de la calle Delicias, que esta iniciativa forma parte del Plan Local de Comercio aprobado por unanimidad al inicio del mandato 2019-2023.

Esta medida ha sido juzgada por los ciudadanos con memes en las redes sociales por su escasa eficiencia y funcionalidad.

El Plan Local de Comercio se ideó ante la necesidad de impulsar una innovación comercial y revitalización de la vía pública, como apuesta por el comercio, los barrios y las calles.

Para dicho proyecto, se previó una inversión de 51,7 millones de euros; sin embargo, en el presupuesto municipal solo aparecieron 11 millones, de los cuales solo se ha conocido el destino de un millón de euros.

Por un lado, los toldos para dar sombra, como el de la calle Delicias; y por otro, los 15 arcos florales distribuidos por la ciudad, cuyo coste ha ascendido a 250.000 euros.

La portavoz socialista ha criticado el coste de las intervenciones y ha apostillado que el Ayuntamiento no los vuelva a colocar y culpa a los comerciantes.

Por otra parte, ha pedido que la Asociación de Comerciantes no se convierta en pagana de esta decisión.

Así, Lola Ranera ha emplazado al Ayuntamiento de Zaragoza a arbitrar las fórmulas necesarias a la mayor brevedad para la instalación de los toldos porque ese dinero ya se ha gastado y han sido 500.000 euros.

La portavoz municipal socialista se ha referido al aumento de dudas e inseguridad jurídica con respecto a este asunto, motivo por el cual el Gobierno de Aragón ha planteado irregularidades en el expediente, anticipando su intención de trasladarlo a la Fiscalía.

Asimismo, ha finalizado diciendo que las administraciones deben proteger a los ciudadanos y luchar contra cambio climático, pensando en cómo bajar la temperatura de las ciudades; mientras en el Ayuntamiento de Zaragoza hacemos el ridículo de forma incalculable con un gasto de 500.000 euros en unos toldos que ahora están en los locales de la asociación de comerciantes.