Teruel, 29 de enero. En un desarrollo que se considera un paso significativo para la ciudad, la alcaldesa Emma Buj ha manifestado su entusiasmo por el inicio de las obras de la Cuesta de los Gitanos. Este proyecto, que se ejecutará hasta finales de este año, fue objeto de una visita este miércoles por parte de Buj, acompañada por el presidente de la Diputación Provincial de Teruel (DPT), Joaquín Juste, y el concejal de Infraestructuras del Ayuntamiento, Juan Carlos Cruzado.

En las primeras horas de este miércoles, los trabajadores de Tragsa, la empresa seleccionada para llevar a cabo este proyecto, comenzaron a establecer el área de trabajo. Se impidió el acceso a vehículos en la cuesta, mientras que otros operarios montaban las casetas de obra cerca de la Iglesia de Santa Emerenciana. Además, en este día se firmó el acta que da luz verde al inicio oficial de las labores de construcción.

La alcaldesa subrayó la importancia de este acontecimiento, señalando que, luego de muchas complicaciones y un largo proceso de tramitación, por fin se dan los primeros pasos de este necesario proyecto. Buj destacó la relevancia del ensanchamiento y acondicionamiento de esta vía, fundamental para el flujo de tránsito de los habitantes de Teruel, especialmente por su papel como una de las entradas y salidas esenciales del barrio del Ensanche, y por ser utilizada a diario por los trabajadores que se dirigen al Parque Industrial La Paz.

Aunque la alcaldesa reconoce que la obra no es de gran envergadura, sí afirmó que es técnicamente compleja. Indicó que, al finalizar los trabajos, la conectividad y la movilidad en la ciudad mejorarán notablemente. Sin embargo, también advirtió a los ciudadanos sobre las "molestias" que se producirán durante algunos meses, insistiendo en que estos pequeños inconvenientes valdrán la pena, ya que el resultado final será un acceso a Teruel "renovado, seguro, con carril bici, bancos y arbolado".

En este mismo contexto, Joaquín Juste, presidente de la Diputación Provincial, expresó que es un "deber, al tiempo que un honor", colaborar desde la institución con los 236 municipios de la provincia, incluyendo la capital. Este esfuerzo conjunto evidencia el compromiso por mejorar la infraestructura local y la calidad de vida de los ciudadanos.

La Cuesta de los Gitanos se extiende a lo largo de 450 metros, y está pavimentada con hormigón, conectando el Barrio del Ensanche con la carretera N-234 y la TE-V-6014 que lleva a Villaspesa. Inicialmente, la sociedad municipal Urban intentó licitar las obras de mejora y acondicionamiento de esta vía, pero no se presentaron ofertas. Esto llevó al Ayuntamiento de Teruel a solicitar la ayuda de la Diputación Provincial para utilizar los servicios de Tragsa, resultando en un convenio firmado entre ambas administraciones para llevar a cabo el proyecto.

El diseño de la nueva vía prevé una ampliación a nueve metros de ancho, incluyendo dos carriles de tres metros cada uno y un carril bici de un metro de ancho a la derecha, al mismo nivel que la calzada. La acera en el lado izquierdo tendrá una anchura de dos metros, y se plantarán árboles en varios puntos a lo largo del tramo mejorado.

Este proyecto también contempla la adecuación del acceso bajo la vía del tren, facilitando una continuidad adecuada de la rasante en esa zona. Además, se instalará una nueva red para la distribución de agua potable que conectará el Polígono Residencial Sur con el suministro de agua, junto con un sistema de alumbrado para el nuevo vial.

El presupuesto total del proyecto asciende a 757.161,95 euros, a lo que se añade un 21% de IVA, sumando un total de 916.165,96 euros. La ejecución de la obra está prevista para concluir en un plazo de nueve meses, marcando así un avance clave en la modernización de la infraestructura de Teruel.