En un importante avance en la lucha contra la criminalidad, la Guardia Civil ha logrado la detención de un hombre de 35 años de origen rumano, con un historial delictivo, que residía en Calatayud. Su arresto es el resultado de la operación 'Galtpes', enfocada en un robo violento que tuvo lugar en Tarazona el pasado mes de agosto, con una mujer de edad avanzada como víctima.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 13 de agosto, cuando el delincuente ingresó a una vivienda en Tarazona tras escalar por una ventana que se encontraba abierta en la segunda planta. La víctima, que presenta dificultades auditivas, fue sorprendida por detrás, momento en el que el agresor la sometió, amordazando y atando sus manos con medias que pertenecían a ella.

En un acto brutal, la mujer cayó al suelo y sufrió un fuerte golpe en la cabeza, circunstancia que no detuvo al atacante, quien continuó despojando el hogar de objetos de valor, incluyendo joyas, 1.900 euros en efectivo y el teléfono móvil de la víctima. Tras concluir su fechoría, el individuo abandonó el lugar, dejando a la mujer inmovilizada y herida.

La víctima logró liberarse varias horas después y salió de su casa en busca de ayuda. Debido a la gravedad de su situación, fue trasladada a un hospital para recibir atención médica por el traumatismo craneoencefálico que había sufrido.

La investigación del caso fue liderada por el Equipo de Policía Judicial de Tarazona, que logró identificar al sospechoso gracias a su meticuloso trabajo. Con la información necesaria, se organizó un operativo en Calatayud, donde finalmente fue detenido en la madrugada del 7 de octubre.

Durante el registro de la vivienda del acusado, los agentes recuperaron el teléfono de la víctima, junto con otros dispositivos móviles y joyas, los cuales están siendo investigados para confirmar su procedencia. Este operativo contó con la colaboración de miembros de USECIC, reforzando el compromiso de las autoridades en el combate del crimen y la protección de los más vulnerables.