El pasado 30 de enero, la Policía Nacional llevó a cabo la detención de un hombre de 53 años en Huesca, identificado como vecino de Zaragoza, bajo la sospecha de haber cometido delitos de exhibicionismo y corrupción de menores. Este individuo ya contaba con antecedentes por comportamientos similares, lo que ha generado una profunda preocupación en la comunidad.

Los hechos ocurrieron el 18 de enero, cuando el hombre fue sorprendido conduciendo su vehículo sin ropa en la parte inferior del cuerpo. Se acercó a una menor que caminaba por la calle, tratando de engañarla al preguntarle por una dirección, mientras buscaba que la niña se acercara lo suficiente como para que pudiera observar su desnudez. Este comportamiento inaceptable no solo es un acto de exhibicionismo, sino que representa un grave intento de corrupción de menores, un tema que exige nuestra atención y acción urgente.

La menor, al darse cuenta de la situación perturbadora, rápidamente se alejó del lugar y acudió a sus padres para relatarles lo sucedido. Juntos decidieron presentar una denuncia formal, la cual fue asumida por la Unidad de Atención a la Familia y a la Mujer. Este tipo de reacción es un claro ejemplo de cómo debemos empoderar a nuestros jóvenes para que reconozcan y denuncien situaciones de riesgo, en un entorno que debería ser seguro para todos.

Las investigaciones se intensificaron, y gracias al análisis de las grabaciones de las cámaras de videovigilancia en la zona, las autoridades lograron confirmar la veracidad de las denuncias y determinar la identidad del sospechoso. Finalmente, el hombre fue arrestado el 27 de enero, un paso necesario para la justicia y para la prevención de futuros incidentes de este tipo. Estos casos resaltan la importancia de una vigilancia activa y una respuesta efectiva de las fuerzas del orden en la protección de nuestros niños y adolescentes.