Este sábado, la ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, conmemoró el 25 aniversario del CEIP Domingo Jiménez Beltrán en Calatorao, Zaragoza, en una celebración que trascendió los muros del centro para involucrar a toda la comunidad local.

Un grupo de alumnos, de los 250 que forman la comunidad escolar, se convirtió en el anfitrión perfecto para Alegría, llevándola a través de las instalaciones de una escuela que ofrece educación Infantil y Primaria y que se destaca como uno de los pocos centros en Aragón que ha digitalizado sus aulas.

Durante la visita, la ministra tuvo la oportunidad de explorar varios de los proyectos innovadores que el CEIP ha implementado, tales como la radio escolar, el huerto educativo, iniciativas de robótica, la impresión 3D, así como el 'Reto Tech' y el programa de patios activos.

Alegría no escatimó en elogios hacia la colaboración y el compromiso del Ayuntamiento de Calatorao y su alcalde, David Felipe, resaltando la importancia del apoyo constante a la educación en la localidad.

“Para mantener vivos nuestros pueblos y asegurar que sigan desarrollando proyectos familiares, es fundamental tener colegios. La clausura de un centro educativo es el primer paso hacia la descomposición de la comunidad,” afirmó la ministra.

Agradeció, además, el papel fundamental que juegan las familias al respaldar a sus hijos y colaborar con el profesorado para facilitar la jornada escolar.

La ministra dejó claro que “una escuela no es solo un lugar de enseñanza; es un espacio donde se construye comunidad”. Subrayó que “un pueblo que protege su escuela también está invirtiendo en su presente y su futuro”, enfatizando la interconexión entre educación y sostenibilidad comunitaria.

Alegría también se refirió al compromiso del cuerpo docente y la dirección del centro, valorando su dedicación al servicio público. “Cada día, ustedes generan curiosidad en los estudiantes y contribuyen a forjar una sociedad más justa y equitativa. Sin la labor de nuestros maestros y maestras, no tendríamos la calidad de vida que disfrutamos hoy,” expresó.

En un emotivo momento, la ministra recordó a Domingo Jiménez Beltrán, primer director de la Agencia Europea de Medio Ambiente y un referente en el compromiso social, poniendo de manifiesto su legado por un mundo mejor.

Por último, Pilar Alegría celebró la perseverancia de los vecinos de Calatorao, quienes en el año 2000 lucharon por la construcción de un nuevo espacio educativo. Al mirar hacia atrás, se congratuló de que, a 25 años de distancia, “nunca ha dejado de existir la convicción de que la educación es la herramienta más potente para transformar el futuro”.