¿Te apetece hacer una escapada diferente? Pues no necesitas ir muy lejos. A tan solo 40 kilómetros de Zaragoza puedes encontrar Belchite, un pueblo con mucha historia y un patrimonio cultural muy interesante.
En primer lugar, destaca la visita al antiguo pueblo de Belchite, arrasado durante la Guerra Civil Española en el año 1937 y cuyas ruinas se mantienen en pie como un testimonio vivo de los trágicos acontecimientos que sucedieron en aquellos años. Además, se pueden visitar varios museos dedicados a la Guerra Civil, como el Centro de Interpretación de Precipicios o el Museo del Frente de Aragón.
Además de la historia, Belchite también tiene atractivos turísticos como el Santuario de Nuestra Señora del Pueyo, un templo barroco del siglo XVIII con una arquitectura espectacular y un entorno natural maravilloso en la cima de una colina. Otro lugar imprescindible es el Castillo de Belchite, datado en el siglo XIII y que ha sido restaurado recientemente, lo que permite disfrutar de unas vistas impresionantes del pueblo y su entorno.
Después de la visita turística, es obligatorio probar la gastronomía local. La cocina de Belchite es típicamente aragonesa, con platos contundentes y sabrosos que hacen las delicias de los comensales. Entre los platos más destacables se encuentran el ternasco a la brasa, las migas, la olla de San Antón y los dulces típicos como las frutas de Aragón o el hojaldre de Belchite.
Además de las visitas turísticas y la gastronomía, Belchite ofrece una gran variedad de actividades para todas las edades. Se pueden realizar rutas en bicicleta por los alrededores, senderismo por los Montes Universales o incluso hacer vuelos en globo para disfrutar de una panorámica única del pueblo.
También es interesante visitar Belchite durante sus fiestas patronales durante el mes de agosto, en las que se realizan numerosas actividades como procesiones, conciertos, verbenas o el tradicional toro de fuego.
En definitiva, Belchite es un destino turístico ideal para aquellos que desean conocer la historia de nuestro país y disfrutar de una gastronomía única en un entorno natural inigualable. Además, sus múltiples actividades y la cercanía a Zaragoza hacen que sea una opción perfecta para hacer una escapada de fin de semana o incluso un día.