La vicepresidenta del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, ha expresado su profunda decepción y frustración tras abandonar la reunión del comité preparatorio de la Conferencia de Presidentes sin tener una fecha concreta para su celebración.

"Para nosotros, esto representa un retroceso. No nos conforma que nos prometan que será antes de que acabe el año. En el pasado, hemos visto reuniones que se han planeado sin una fecha definida y que al final han sido canceladas. Creo que hoy se ha faltado el respeto a todas las comunidades autónomas", criticó Vaquero.

La representante aragonesa en la reunión de este lunes en Madrid calificó la falta de información sobre la fecha de la conferencia como "decepcionante": "¿De qué sirve esta reunión preparatoria si ni siquiera hemos podido saber cuándo se llevará a cabo la Conferencia de Presidentes?", se preguntó.

Vaquero explicó que Aragón acudió a la reunión con la esperanza de conocer y concretar los temas que estarían en la agenda, como la financiación autonómica, la crisis de vivienda, la inmigración, y la escasez de personal sanitario, asuntos que, reconoció, coinciden con las propuestas del Gobierno de Aragón.

Para Vaquero, la falta de un compromiso claro resulta "frustrante": "Después de dos años sin celebrarse la Conferencia de Presidentes, a pesar del reglamento que estipula que debe haber una reunión cada seis meses; después de que las comunidades autónomas hayamos tenido que recurrir a la vía judicial, y que el Tribunal Supremo nos haya dado la razón, ahora no sabemos cuándo se llevará a cabo, lo que significa que estos temas prioritarios pueden cambiar".

La vicepresidenta resaltó la colaboración y lealtad institucional con la que Aragón participó en la reunión del lunes para abordar asuntos que considera urgentes por haber sido postergados por mucho tiempo, tales como la financiación autonómica, la crisis de vivienda, la inmigración, y la falta de personal médico.

Vaquero lamentó que la financiación esté mermando los recursos disponibles para los servicios públicos, junto a otros problemas como la escasez de viviendas y de profesionales médicos, problemas estructurales que afectan a todas las comunidades autónomas.