La maniobra Heimlich es una técnica crucial de primeros auxilios para desobstruir el conducto respiratorio, principalmente utilizado en situaciones de emergencia.

En Zaragoza, un valiente Oficial de Policía de la Jefatura Superior de Policía de Aragón demostró su destreza al salvar la vida de un compañero que se vio en apuros al atragantarse con un trozo de comida, poniendo en riesgo su capacidad respiratoria.

La situación, que tuvo lugar el 22 de marzo alrededor de las 12:00 horas, durante el almuerzo de un operador en la Sala CIMACC 091, llevó al compañero a actuar con rapidez al notar que la situación se volvía crítica, evidenciado por los signos de cianosis en la víctima.

Con determinación, el héroe de la Jefatura llevó a cabo la maniobra Heimlich durante dos minutos, hasta lograr liberar las vías respiratorias del agente, permitiéndole recuperar la normalidad en su capacidad para respirar.

Inmediatamente, el Jefe de Sala solicitó la intervención de los Servicios Médicos de la Jefatura para asegurarse de que la salud del agente estaba en buen estado, confirmando que sus signos vitales eran estables y normales.

La maniobra de Heimlich, también conocida como compresiones abdominales, destaca por su efectividad al desobstruir el conducto respiratorio en situaciones críticas donde la vida está en peligro, especialmente cuando objetos extraños bloquean la vía aérea.

Es importante recordar que este procedimiento solo debe realizarse en casos de asfixia grave, donde la persona afectada no pueda hablar, toser o respirar correctamente. En situaciones menos urgentes, otras medidas deben ser consideradas antes de recurrir a la maniobra Heimlich.