El consejero municipal de Urbanismo, Víctor Serrano, ha asegurado que el Gobierno de Zaragoza continuará con el Plan A para la demolición y construcción por fases del estadio de La Romareda, haciendo hincapié en la importancia de la prudencia ante un posible Plan B que implicaría la construcción de un campo más pequeño y provisional para el Real Zaragoza.

En una rueda de prensa, Serrano destacó que la alcaldesa Natalia Chueca enfatizó que el Plan A busca maximizar el aforo y la comodidad para los aficionados del Real Zaragoza. La fase sur del proyecto de demolición ya está en proceso de licitación, lo que evidencia el compromiso con la construcción del nuevo estadio.

El consejero también mencionó que se están explorando otros escenarios, atendiendo a las solicitudes de La Liga para encontrar alternativas que permitan que se jueguen los partidos mientras se lleva a cabo la construcción.

Serrano hizo hincapié en la importancia de la prudencia y la transparencia en el proceso, señalando que se informará detalladamente a medida que se avance en las decisiones. Además, aseguró que el trabajo en el interior de La Romareda comenzará el 7 de julio, sin embargo, no se llegará a una solución definitiva antes de ese momento.

En resumen, el Plan A se mantendrá como el plan principal para la construcción del nuevo estadio, con la premisa de mejorar las instalaciones para garantizar la comodidad de los aficionados y el máximo aforo posible, siempre estudiando posibles escenarios alternativos.