En Zaragoza, la estructura piramidal de la Ofrenda de Flores a la Virgen del Pilar ha comenzado a montarse con gran emoción este jueves 10 de octubre. Este montaje culminará mañana viernes con la colocación de la réplica de la imagen para que el 12 de octubre, se cubra con un vibrante manto formado por los ramos de miles de oferentes.

Esta impresionante estructura de seis niveles tiene una altura de aproximadamente 15.50 metros. Con dimensiones de 16.70 por 27.03 metros y un peso de unas 40 toneladas, esta estructura puede albergar alrededor de 7 millones de flores.

La imagen de la Virgen será colocada mañana por la mañana por las Brigadas Municipales con la asistencia de una grúa. La imagen, hecha de fibra de poliéster, pesa 15 kilos y mide 1.43 metros, mientras que la corona con resplandores tiene un diámetro de 2.64 metros. El majestuoso manto, de 2.50 metros de altura y un peso de aproximadamente 525 kilos, estará decorado con flores de color rojo en este año par.

Para dar mayor relevancia a este momento tan especial, se ha programado un acto institucional a las 12 del mediodía para el viernes, con la presencia de la alcaldesa Natalia Chueca, la consejera municipal Sara Fernández y el arzobispo de Zaragoza, monseñor Carlos Escribano.

Con la participación de cientos de personas entre jardineros, auxiliares de jardinería y personal de Protección Civil, Cruz Roja, Bomberos, Policía Local y Nacional, la Ofrenda de Flores de 2024 promete batir récords con más de 1,000 grupos participantes, un 21% más que el año pasado.

Los grupos irán desfilando por las calles de Zaragoza para depositar sus ramos y centros florales en la estructura de la plaza del Pilar. Se ha habilitado un horario ampliado para aquellos oferentes que quieran participar de manera individual, y se recomienda traer un ramo modelo bastón sin envoltorios para una Ofrenda de Flores más impactante.

El Ayuntamiento de Zaragoza ha advertido que los grupos que incumplan las normas establecidas durante la ofrenda no podrán participar el año siguiente. Sin embargo, la emoción y la devoción por la Virgen del Pilar se mantienen fuertes en la comunidad zaragozana, que espera con ansias el emocionante evento del 12 de octubre.