Teruel, 8 de noviembre. En los campos de Mas de las Matas, ya han comenzado a recolectarse las primeras zanahorias amarillas y moradas autóctonas, un paso significativo dentro de un proyecto que busca revivir una variedad "única y olvidada". Esta iniciativa ha sido impulsada por la Oficina de Asesoramiento Agroalimentario, que ha trabajado en la concentración parcelaria en este municipio y los cercanos Aguaviva y La Ginebrosa, con el valioso respaldo del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA).

El esfuerzo conjunto entre el Banco de Germoplasma del CITA y la colaboración de algunos agricultores locales ha dado sus frutos, presentándose esta semana las primeras cosechas de un proyecto que aspira a resaltar la relevancia de este producto autóctono. Se espera que las zanahorias amarillas y moradas puedan convertirse en un "diferenciador" dentro de las producciones agrarias de la región, con el potencial de facilitar un desarrollo económico cimentado en la actividad agrícola, donde la cooperativa masina de San Antonio jugaría un papel determinante.

La iniciativa, desarrollada bajo la dirección de la Oficina de Asesoramiento Agroalimentario y respaldada por el Ayuntamiento de Mas de las Matas, pone de relieve que estas variedades de zanahoria podrían ser cruciales para revitalizar la agricultura en un área marcada por numerosas parcelas en desuso. Este esfuerzo no solo busca reconstruir el paisaje agrícola, sino también restablecer los lazos perdidos con las tradiciones agrícolas y la identidad cultural de la comunidad.

Aunque el cultivo de zanahorias en Mas de las Matas había estado tradicionalmente limitado al autoconsumo, los impulsores del proyecto han fijado la vista en el ámbito comercial. Para ello, se busca la colaboración de socios interesados en impulsar y comercializar esta hortaliza, sin olvidar la importancia de implementar programas de capacitación para los agricultores locales. También se plantean incentivos económicos y apoyo por parte de la Administración, así como campañas promocionales para fomentar el interés de los consumidores.

La zanahoria amarilla y morada, una hortaliza autóctona que se destaca por su sabor suave y su riqueza en nutrientes, no solo aporta un atractivo visual, sino que también contribuye a la salud. Su versatilidad la convierte en un ingrediente ideal para diversas elaboraciones culinarias, lo que podría dar pie a la creación de nuevas experiencias gastronómicas. Cabe destacar que la desaparición de estas variedades ha significado una pérdida significativa, no solo en el plano agrícola, sino también en la vasta herencia culinaria de la región.