Los residentes de Letux, en la provincia de Zaragoza, se encuentran a la espera de que la lluvia cese para evaluar los estragos y comenzar a trabajar en la reparación de las infraestructuras afectadas por las inundaciones causadas por el desborde del río Aguasvivas, consideradas las más graves en 80 años.

El alcalde de Letux, Miguel Sanz, ha informado a Europa Press que la situación está bajo "control", pues el nivel del río ha descendido y casi vuelve a su cauce original. Sin embargo, continúa lloviendo con intensidad, lo que impide el acceso a ciertas áreas.

El pico máximo de la crecida se registró el miércoles alrededor de las 15:00 horas, aunque se veía venir debido a la situación en localidades cercanas como Villar de los Navarros, Herrera de los Navarros o Azuara. Sanz ha explicado que el agua proveniente de estas zonas, de los ríos Herrera y Cámaras, confluye con el río Aguasvivas, el cual también venía con un caudal importante, justo en Letux. "Todo el agua termina en Letux. Inunda Azuara y sigue hacia Letux", añadió.

Este punto de encuentro de aguas es crucial, según el alcalde, quien mencionó que el embalse de Moneva, ubicado varios kilómetros más arriba de Letux, retuvo parte de la crecida pero no lo suficiente. El río Aguasvivas iba crecido principalmente debido a las lluvias en la provincia de Teruel, con registros de 35 litros en Letux y 40 en Herrera.

Como consecuencia, las huertas de la zona quedaron totalmente inundadas, con los cultivos "intransitables" y los caminos "inhabilitados", afirmó el alcalde. A pesar de ello, se debe aguardar a que la lluvia ceje. "Ya parará", expresó la comunidad. El agua también ingresó en algunas viviendas de la parte baja del pueblo.

Durante la mañana del jueves pudieron llevar a cabo labores de limpieza y las calles ya están despejadas, gracias a la lluvia que facilitó la remoción del barro.

No obstante, para evaluar los daños en caminos y canales, es necesario esperar a que mejore el clima, concluyó Sanz, quien anunció que solicitará ayuda a la Diputación Provincial de Zaragoza para la reparación de las infraestructuras afectadas.