La Confederación Hidrográfica del Ebro monitorea los ríos de Aragón por las lluvias, menos intensas que las anteriores.

En Zaragoza, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) se mantiene alerta ante las intensas lluvias caídas durante la madrugada, aunque menos copiosas que en días anteriores.

La CHE ha informado que las crecidas extraordinarias en las cuencas altas del Jalón y del Alcanadre han llegado a los tramos bajos de los ríos este miércoles. En Ballobar (Huesca), el río Alcanadre ha alcanzado un nivel de 2.50 metros y un caudal de 140 metros cúbicos por segundo, superando el umbral de aviso amarillo. Mientras que en Grisén (Zaragoza), el río Jalón registró un nivel de 1.75 metros y un caudal de 35 metros cúbicos por segundo.

La CHE ha indicado que los tramos altos de ambas cuencas han vuelto a niveles normales. A pesar de los chubascos de esta madrugada, los acumulados de precipitación fueron menos intensos que en días anteriores, entre 20 y 40 litros por metro cuadrado en varias cuencas.

Para la tarde y el jueves no se esperan lluvias significativas, pero el viernes se prevé un retorno de la inestabilidad atmosférica y el riesgo hidrológico en la cuenca del Ebro.

Se esperan chubascos intensos, con riesgo de incrementos súbitos de caudal en barrancos y cauces menores. La CHE recomienda estar alerta y seguir la situación en las páginas de la AEMet, del SAIHEbro y de Confederación y tener precaución en actividades cerca de los cauces.