HUESCA, 16 de noviembre. En un relevante esfuerzo por velar por la seguridad vial, agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Huesca han denunciado a un individuo que se dirigía a una evaluación teórica para la renovación de su licencia profesional en el transporte de mercancías peligrosas, mientras conducía un vehículo particular con niveles de alcohol superiores a lo permitido.

El incidente tuvo lugar el pasado 13 de noviembre en el centro de exámenes de la Jefatura Provincial de Huesca. Los agentes, al notar la presencia de un conductor que mostraba evidentes signos de haber consumido alcohol, decidieron llevar a cabo las pruebas de alcoholemia correspondientes. Los resultados fueron alarmantes, marcando 0,50 mg/l y 0,47 mg/l de alcohol en dos mediciones sucesivas, cifras que superan con creces el límite legal establecido.

El infractor, un hombre de 49 años residente en Huesca, fue denunciado según lo estipulado en el Reglamento General de Circulación, y su caso fue remitido a la Jefatura Provincial de Tráfico. Esta intervención no solo refleja el compromiso de las autoridades con la seguridad de las vías, sino que también pone de manifiesto la responsabilidad que deben asumir quienes están al volante, especialmente cuando se trata de un derecho tan crucial como el transporte de mercancías peligrosas.

Las sanciones en estos casos son severas. Superar la tasa de 0,25 mg/l en aire espirado conlleva una multa de 500 euros y la pérdida de cuatro puntos del carnet de conducir. Pero la infracción se convierte en algo aún más grave si se exceden los 0,50 mg/l, ya que la multa se eleva a 1000 euros y se pierden seis puntos, además de la posible inmovilización del vehículo, lo que subraya la seriedad con la que se trata esta cuestión en el contexto de la seguridad vial.