HUESCA, 24 Ene.

El concejal no adscrito del Ayuntamiento de Huesca, Antonio Laborda, ha presentado una demanda de conciliación en los juzgados de la ciudad contra sus excompañeros del grupo municipal de VOX --José Luis Rubió y Susana Magán--, contra el presidente de la gestora del partido en la provincia, Fermín Civiac, y contra el propio grupo municipal. Esta acción legal es previa al ejercicio de acciones penales contra ellos y está basada en acusaciones de "calumnias con publicidad".

La denuncia se apoya en unas "afirmaciones difamatorias" contra Laborda, pronunciadas durante una rueda de prensa convocada por el grupo municipal de VOX en el Ayuntamiento de Huesca el pasado 28 de noviembre de 2023.

A estas declaraciones dañinas sobre su gestión como portavoz municipal de VOX entre 2019 y 2023, Laborda suma también un escrito presentado por su sucesor en la portavocía, José Luis Rubió, en el Registro General del Ayuntamiento. En este documento de 459 folios, se hizo público una gran cantidad de correos electrónicos privados, que mencionaban tanto a personas físicas como jurídicas. Esto supuestamente viola las leyes de protección de datos y los derechos al honor e intimidad de las personas mencionadas, incluyendo al propio concejal.

Antonio Laborda abandonó VOX el 21 de noviembre y se unió al Grupo Mixto como concejal no adscrito. Esta decisión se debió a la escasa colaboración que recibió por parte de los líderes nacionales y provinciales del partido, así como de sus compañeros de grupo municipal. Además, fue retirado de su posición como portavoz, lo cual también influyó en su desvinculación de la formación política.