Este domingo, representantes de Chunta Aragonesista han llevado su mensaje de apoyo a la localidad de Ráfales, en la provincia de Teruel, donde han manifestado su solidaridad con la entera comarca del Matarraña, que ha sufrido graves daños tras el paso de la DANA. Durante este encuentro, los representantes de CHA han exigido la activación de ayudas económicas urgentes para recuperarse de los estragos en infraestructuras y mitigar el impacto en sectores vitales como el agrícola y el turístico.

La delegación, encabezada por Isabel Lasobras, secretaria general de CHA, incluía a destacados miembros de la formación aragonesista, como Javier Carbó, secretario territorial en las comarcas turolenses; José Manuel Latorre, portavoz en la Diputación Provincial de Zaragoza; y Alberto Celma, vicesecretario general de Relaciones Institucionales, Estrategia y Formación.

En su intervención, Javier Carbó compartió la profunda preocupación de CHA por el estado en el que ha quedado la Vía Verde, una ruta esencial para el turismo rural que se extiende a lo largo de 35 kilómetros, desde Valjunquera hasta Lledó. “Los desprendimientos y los daños en el pavimento han hecho que esta infraestructura sea, en estos momentos, impracticable”, alertó Carbó con un tono de urgencia.

Frente a esta grave situación, el secretario territorial exigió una respuesta inmediata para restaurar la Vía Verde y los caminos que han quedado afectados. Carbó enfatizó lo crítico que resulta asegurar el acondicionamiento de estas rutas para revitalizar el turismo en la zona, un sector que se convierte en clave para la economía local.

El representante de CHA también hizo hincapié en la intransitabilidad y el peligro que enfrenta la población en localidades como Valderrobres, Beceite y Mazaleón, donde los caminos y accesos presentan importantes socavones y desprendimientos, sobre todo los que conducen a los Puertos de Beceite. “Es evidente que los ayuntamientos y los vecinos no pueden afrontar esta situación con sus propios recursos”, subrayó Carbó, pidiendo apoyo de instituciones superiores.

Considera que es urgente dar respuesta a este escenario caótico, pidiendo la maquinaria y otros recursos necesarios para llevar a cabo las reparaciones primordiales. Añadiendo más preocupaciones, resaltó los daños ocasionados en los sistemas de riego y acequias, esenciales para la actividad agrícola del Matarraña.

“El sector agrícola está enfrentándose a severas pérdidas de cultivos y daños estructurales en sus sistemas de transporte de agua, sumados a las obstrucciones de desagües y tuberías rotas. Esto significa una amenaza significativa para la economía agrícola y el sustento de numerosas familias en la comarca”, advirtió.

En este contexto, Carbó instó a la Administración a priorizar la reparación de estas infraestructuras que son vitales para el bienestar de la comunidad. “Desde CHA, nos comprometemos a trabajar para que se dispongan fondos extraordinarios de emergencia y para que se puedan articular ayudas directas tanto a los municipios como a los afectados, enfocadas en la reconstrucción de infraestructuras dañadas, la restauración del suministro de agua potable y la garantía de seguridad en las vías de acceso”, concluyó con determinación.