En un hito histórico para la comunidad aragonesa, la localidad de Benasque, situada en el Pirineo oscense, será el hogar del primer rocódromo de la historia de Aragón. Este innovador proyecto, que reúne las tres modalidades de escalada: boulder, velocidad y dificultad, cuenta con una inversión total de 1,2 millones de euros, marcando un avance significativo en el ámbito deportivo de la región.

La buena noticia fue anunciada por la directora general de Deporte del Gobierno de Aragón, Cristina García, durante una rueda de prensa en la que estuvo acompañada por el presidente de la Federación Aragonesa de Montañismo, Javier Franco, y el arquitecto Carlos Navarro, de BHaus Arquitectura Eficiente. Esta iniciativa no solo busca enriquecer el paisaje deportivo de Aragón, sino también adaptar las instalaciones a las crecientes demandas de los escaladores locales.

La construcción del rocódromo formará parte de la Escuela de Alta Montaña de Benasque, estrategia que permitirá a los deportistas aragoneses entrenar en condiciones adecuadas sin necesidad de desplazarse fuera de la comunidad. Se destinarán 850.000 euros provenientes de fondos europeos PRTR para la mejora de la eficiencia energética, junto con 350.000 euros de recursos propios del Gobierno aragonés, un esfuerzo que reafirma el compromiso de las autoridades con el desarrollo deportivo sostenible.

García subrayó la importancia de este proyecto como una respuesta a las necesidades históricas del deporte en Aragón, destacando que permitirá a muchos deportistas acceder a instalaciones adecuadas. “Era un proyecto de obligado cumplimiento por parte de nuestro gobierno”, aseguró, enfatizando que esta instalación facilitará el entrenamiento diario de los atletas aragoneses.

El presidente de la Federación Aragonesa de Montañismo, Javier Franco, expresó su satisfacción por la realización de esta obra, describiéndola como una instalación muy esperada que revitalizará el centro de Benasque. La creación de un espacio moderno para la escalada no solo atraerá a entusiastas del deporte, sino que también contribuirá al atractivo turístico de la zona.

El arquitecto Carlos Navarro detalló que la construcción del nuevo rocódromo implicará la rehabilitación del edificio existente, ajustando las instalaciones a los estándares regionales y olímpicos. Además, el proyecto se centrará en maximizar la eficiencia energética del edificio mediante la modernización de sus estructuras, todo ello manteniendo un diseño que priorice los materiales sostenibles como la piedra y la madera.

Se prevé que las obras finalicen en diciembre de 2025, cumpliendo con los plazos establecidos en el Plan Pirineos del Gobierno aragonés. La Escuela de Alta Montaña de Benasque se destaca como el único centro especializado en Tecnificación Deportiva de Alta Montaña reconocido a nivel estatal por el Consejo Superior de Deportes, brindando un contexto ideal para tal desarrollo.

Ambos edificios que componen la instalación tienen más de 30 años y requieren de intervención para poder satisfacer las necesidades actuales de aislamiento y eficiencia. Esto resalta la importancia de modernizar y adaptar estos espacios para que sean más sostenibles y funcionales, garantizando así la mejor experiencia posible para los deportistas.

Aragón ha sido dotado de fondos europeos para potenciar la eficiencia energética en sus instalaciones deportivas, con un total de 1.492.121,25 euros destinados a mejorar la tecnología y accesibilidad de los centros de alto rendimiento. La meta es clara: reducir la demanda energética en un 30%, con el fin de fomentar un entorno deportivo más responsable y consciente con el medio ambiente.

Las obras ya han comenzado en la Escuela de Alta Montaña, incluyendo la renovación de la carpintería exterior y la mejora de sistemas de calefacción y electricidad. Estas acciones son parte de un esfuerzo integral por modernizar los espacios, haciendo hincapié en la sostenibilidad y el aumento del confort.

Además, se contempla la sustitución de la envolvente del rocódromo, un paso fundamental para asegurar el cumplimiento de los estándares actuales de escalada y eficiencia. La obra, adjudicada a BHaus Arquitectura Eficiente, será crucial para proporcionar instalaciones adecuadas y necesarias para la formación de los escaladores.

El rocódromo, que se espera sea una instalación emblemática, contará con una superficie total de 630 metros cuadrados, incluyendo diversas áreas dedicadas a la práctica de la escalada, lo que permitirá a los deportistas entrenar en todas las modalidades de manera eficiente y segura. Con estas instalaciones, Aragón se sitúa en la vanguardia del deporte de escalada en España.