El Gobierno de Aragón ha presentado un ambicioso plan para impulsar la industria del esquí en la región, con la colaboración entre el sector público y privado. Este plan contempla una inversión de 78 millones de euros a lo largo de cuatro años, hasta 2027, con el objetivo de expandir la red de cañones de nieve en las estaciones de esquí tanto en el Pirineo oscense como en Teruel.

El presidente del Gobierno aragonés, Jorge Azcón, ha detallado que se otorgarán ayudas por un total de 48 millones de euros a las estaciones aragonesas, que se sumarán a los 16 millones de aportaciones empresariales. Además, en Javalambre y Valdelinares se destinarán 13 millones de euros del FITE, con 1,4 millones reservados para este año.

Estos fondos se destinarán a la renovación de maquinaria, edificaciones relacionadas con la innivación y proyectos medioambientales en el entorno de las estaciones de esquí.

La Orden que regula estas ayudas será publicada en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) este jueves. Según Azcón, al asumir el Gobierno, no se contaba con los recursos necesarios para llevar a cabo una inversión estratégica en el sector de la nieve, especialmente en lo referente a los sistemas de innivación.

El director general de Aramón, Toño Gericó, ha destacado que ya se está trabajando activamente en la ejecución de este plan, con la adquisición de 609 nuevos cañones de última generación. Estos nuevos equipos son más eficientes energéticamente, reduciendo los costos en un 30%. Además, se está ampliando la superficie innivada y se prevé una mayor expansión en los próximos años.

El presidente Azcón ha subrayado la importancia de estas inversiones dentro del marco del Plan Pirineos, haciendo énfasis en que la próxima temporada de esquí será todo un éxito gracias a estas mejoras en la innivación.

Asimismo, Azcón ha resaltado el impacto positivo que tiene el sector de la nieve en la economía regional, generando empleo y contribuyendo al desarrollo de las infraestructuras y servicios públicos en las comarcas donde se ubican las estaciones. El esquí representa el 7% del PIB de la región y moviliza más de 3.000 millones de euros anualmente.

Cada esquiador gasta en promedio 68 euros diarios durante su estancia en las estaciones, con el 80% de ese gasto quedándose en las economías locales. El sector emplea de forma directa a 1.300 personas y de manera indirecta a unas 12.000, teniendo un impacto significativo en el turismo nacional e internacional.

Para garantizar la estabilidad del sector y disminuir la incertidumbre asociada a las condiciones de nieve, Azcón ha enfatizado la importancia de contar con suficientes cañones de nieve. La innovación en este aspecto es crucial para mantener la competitividad de las estaciones de esquí.

El presidente autonómico también ha mencionado otros proyectos incluidos en el Plan Pirineos, como la unión de las estaciones de Astún y Candanchú, la construcción de una telecabina en Benasque, entre otros. Destacó que este plan no solo busca fortalecer la industria del esquí, sino que también incluye iniciativas relacionadas con la vivienda en zonas turísticas que presentan necesidades específicas.

En este sentido, se prevé la construcción de 60 viviendas en Sallent de Gállego, 15 en Biescas y 20 en Panticosa, con un total de 294 viviendas distribuidas en 17 municipios de la provincia de Huesca, con el objetivo de impulsar el crecimiento sostenible del sector turístico.